Después de varios días de la Feria de San Marcos uno termina realmente exhausto, fatigado, adolorido; el tamaño del festejo es colosal y las actividades interminables. Es por eso que es la feria de México, una a la que al menos una vez en su vida todo mexicano debe de asistir.
Pues después de esos días uno va todo cansado de regreso, en nuestro caso a la Ciudad de México, y como buenos mexicanos no reservamos en ningún medio de transporte, por lo que la solución obvia es irse en autobús, a luchar por conseguir cuatro lugares juntos.
Estrella Blanca esta llena, tiene lugares pero después de un par de horas; Primera Plus si cuenta con lugar dentro de hora y media, pero son un poco especiales, decidimos sentarnos un poco a analizar las opciones, la obvia es seguir esperando hasta los horarios donde tienen salidas cualquiera de las dos; pero traer a una menor te hace repensar las cosas y no cuidar tanto el dinero, así que a ETN, que en realidad no es tan cara, solo cien pesos más que las otras dos líneas ademas de que hacen descuento a la menor del 50%., y lo mejor, si hay cuatro lugares juntos en la salida que parte en diez minutos.
La atención en taquilla es muy rápida y eficiente, incluso con nombres complicados los escribe sin dificultad al primer intento, el cobro con tarjeta le toma solo 30 segundos; posteriormente nos envía a su sala exclusiva, que esta cerrada con una cadena, por lo que hay que pasar por la puerta común.
En los andenes reina la confusión de otros pasajeros, no hay nadie que oriente a nadie, de ninguna línea, hay que estar muy listos para saber con quien compraste el boleto y buscar su destino en los anuncios luminosos de cada ómnibus. En el caso de ETN es fácil, es un MP1980MX en primera posición, dominando todo lo que se ve; pero el Ayats que esta al lado no es tan visible, así que los pasajeros que se dirigen a Guadalajara tienen muchas dudas, que a falta de personal de la empresa solo les queda preguntarse entre ellos mismos.
Y es que para abordar en ETN solo hay una edecan repartiendo bolsas de lunch, y te indica con un gesto a cual subirte, pero en realidad en la puerta del bus nadie se fija si vas en el correcto.
Una vez depositado el equipaje en la cajuela y con bolsa de lunch en mano a abordar el enorme autobús, el primer nivel huele a aromatizante, pero el segundo no tanto, muestra algunos signos de que le falto una barrida o de que se trata de un extra enviado de último segundo donde no tuvieron tiempo de limpiarlo a profundidad. En los portavasos hay restos de papas fritas, el piso esta sucio y la parte frontal no tiene un olor de lo más agradable.
Lo que si es de gradecer es la comodidad de los asientos, volvieron al estilo de los reposet, mucho mas acolchados y amplios que las butacas de los ayats, con un botos para la reclinación, aunque para regresarlo a su posición es necesario usar el otro brazo para enderezar el respaldo; sin embargo echamos en falta que se reclinen aun más.
Las pantallas individuales son de buen tamaño y tienen buena vista, pero en las partes oscuras de las películas no ofrecen el mejor contraste, ademas presentan muchos cortes las películas. Algo extraño que sucedió, y es raro porque es la primera vez que pasa es un error en los enchufes de los audífonos, al conectar unos JBL T110 hasta el fondo el sonido que se escucha no es claro, de hecho es pésimo y se pierden las voces, pero si lo dejamos flojo si hace bien el contacto y el sonido mejora, no con la mejor calidad del mundo pero al menos se entiende, lo raro de esto es que con los audífonos gratis de ETN si se escucha aceptable. Algo que nunca nos había pasado en otros autobuses de ETN con otro modelos de pantallas, e incluso en otras lineas, siempre habiamos tenido sonido claro.
El lunch box consiste en un panecillo seco con algo de jamón y queso, acompañado por una bebida que elegimos libremente, todas al tiempo. No había nada dulce, ni galleta ni nada más. Solo refresco y el panecillo seco. Y la verdad no esperábamos mucho, ya hemos dicho que la diferencia de precio no es mucha con Primera Plus y Futura Select. En estos casos es mejor pasar por un Subway a abastecerse, solo que en Aguascalientes brillan por su ausencia.
La salida es puntual, por los altavoces el operador se presenta anunciando un camino de seis horas y quince minutos, mismo que cumple con una velocidad de crucero de 105 km/h y ninguna parada; bueno solo se detuvo una vez porque una señora ya grande se ha quejado de se había desbordado un baño, el operador detuvo la marcha para verificar, dijo que el problema es que alguien dejo abierto el garrafon de la cafetería y se derramo toda. Eso fue lo que sucedió, un pasajero inconsciente le valió la seguridad y lo ha dejado abierto, por lo que cabe volver a preguntarse que tanto son útiles esas cafeterías a los pasajeros, porque al menos en el piso superior nadie subió con café o agua.
La llegada en tiempo y forma a la central del norte. Nuestra experiencia como familia fue promediada en 8. Todos coincidieron que fue una buena elección por el espacio y lo rápido del viaje, pero no les gusto que parara en Tepozotlan, que el bus no estuviera limpio y lo escaso del lunch box, las damas no hablaron bien del baño y sus olores.
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